Todos los grupos políticos municipales –excepto el Partido Popular–, las secciones sindicales de CC.OO, SIMPA-SAT y UGT en la fábrica, junto con representantes de otras organizaciones políticas motrileñas hemos prestado nuestro apoyo público a Paco Morata, sindicalista despedido recientemente de la empresa papelera, en una comparecencia ante los medios de comunicación en la que de forma unánime se ha rechazado la actuación de Torraspapel.
Izquierda Unida, a través de su concejal Christian Linares, ha reiterado la posición firme de nuestra organización en defensa de un empleo digno y con derechos para todos los trabajadores y trabajadoras, a la vez que ha denunciado nuevamente la estrategia empresarial de Torraspapel que, con el fin de maximizar sus beneficios empresariales, tiene intención de externalizar algunos de sus procesos productivos llevando a cabo de este modo una regulación de empleo encubierta. Estas actuaciones ponen en serio riesgo el futuro de cientos de familias motrileñas y de su comarca que dependen del empleo directo e indirecto que genera la actividad productiva de la empresa papelera.
Izquierda Unida no cejará en promover todas las medias de presión que considere adecuadas para lograr la readmisión del compañero Paco Morata, así como para forzar a Torraspapel a que abandone sus pretensiones de reducir su actividad productiva en la fábrica de Motril y oriente sus actuaciones desde la necesaria responsabilidad social empresarial que demanda la ciudadanía.