La formación de izquierdas ha criticado la falta de mantenimiento, explicando que la plaza que ronda los 30 años jamás ha visto una inversión destinada a su mantenimiento: los mismos bancos, los mismos setos el mismo césped, que se han ido deteriorando con el tiempo y dejado a morir, a pleno sol sin reponer ni reparar. No hay más que ver su estado. Este gobierno de las derechas te pone cara al sol en cuanto te despistas, pero es algo común a todos los gobiernos que tocan.
Por último, también cabe destacar un importante logro de la señora Chamorro. Decidieron invertir en la plaza anteriormente conocida como Violinista Manuel Pérez Díaz, que no ésta que no ha merecido ninguna inversión, e instalaron columpios, aunque escasos para todos los niños y niñas del barrio. Estos columpios no han durado ni una semana, la mala calidad y la desastrosa gestión de una alcaldesa que solo busca la foto, ha conseguido que el nuevo y prometido parque apenas durase unos días. Desde entonces, después de tres semanas, ahí sigue, clausurado sin que sepamos cuando volverá a estar abierto para el disfrute de todos y todas.
Y es una pena dada la afición de la señora García Chamorro a columpiarse, que no pueda venir a hacerlo a este parque debido a su propia gestión nefasta.