el gobierno del PP y Ciudadanos está dejando caer el carácter público de la Residencia San Luis deteriorando las condiciones laborales de las trabajadoras y externalizando progresivamente el servicio que venían prestando las empleadas públicas.
Se trata de una estrategia de manual, en la que el Parido Popular es un verdadero experto: deteriorar un servicio público para hacerlo insostenible y, entonces, recatarlo a través de manos privadas.
el reconocimiento a la labor de los y las profesionales no puede consistir únicamente en colocar pancartas de agradecimiento a las puertas de la Residencia, en aplausos y en fotos de la alcaldesa y de su equipo allí congregadas.

Lo que las trabajadoras, los usuarios y sus familias necesitan son unas condiciones dignas de trabajo para la plantilla que contribuyan a garantizar la eficacia y la calidad del servicio.
La plantilla de San Luis merece más empatía por parte del gobierno local y menos numeritos propagandísticos de la alcaldesa García Chamorro,