La coalición de izquierdas ha manifestado su solidaridad con los vecinos y vecinas del barrio que se oponen al proyecto de la planta, dada la peligrosidad de los productos que está previsto almacenar, entre otros, ácido sulfúrico, ácido nítrico, ácido fosfórico e hidróxido de sodio considerados, todos ellos, extremadamente dañinos para la salud en caso de accidente.
Ha informado de que se han presentado diversas alegaciones en el período de exposición pública por parte de colectivos vecinales y organizaciones políticas y sociales, entre ellas IU Verdes Equo, cuestionando la instalación de la planta de almacenamiento en una parcela que se ubica a 200 metros de las viviendas y en la proximidad de los diversos equipamientos sociales y educativos del barrio.
Desde IU Verdes Equo se considera que “no es admisible la localización propuesta para una actividad de alto riesgo en un entorno poblacional tan denso y cercano” como es el barrio de El Varadero y los entornos colindantes, donde existen elementos que incrementan el riesgo, en particular otros depósitos de almacenamiento de combustibles.
Reclaman al gobierno local “que se ponga del lado de los vecinos” para velar por su seguridad, su salud y bienestar y que pida al Puerto de Motril la elección de otro emplazamiento para la planta.
Está fuera de toda duda el “impacto negativo de la actividad portuaria sobre la calidad de vida de los residentes del barrio” y de su entorno ––ha afirmado su portavoz municipal, Jose G. Llorente, acompañado por vecinos y vecinas del barrio en las proximidades del emplazamiento previsto de la planta en el recinto portuario.––
Con la instalación de la nueva planta de almacenamiento vendrían a sumarse nuevos elementos que podrían tener “consecuencias negativas” en la vida cotidiana del barrio, las playas del entorno y la competitividad de los negocios turísticos ––señalan desde su Grupo municipal.
Además de la zona residencial de El Varadero, la existencia y actividad de la planta podría afectar de manera negativa a todo el entorno del barrio, como el Colegio público Pablo Ruiz Picasso, a 729 metros de distancia, el SAS a 374 metros, o el consultorio médico del barrio, a una distancia de 772 metros, además de las zonas residenciales de Santa Adela y Camino del Pelaillo, junto con dos de las principales playas del municipio, Poniente y las Azucenas.
El portavoz de la formación de izquierdas reclama al gobierno local actuaciones de regeneración y dinamización en el barrio y su entorno que permitan contener el deterioro progresivo del barrio en los últimos años, incrementándose la vulnerabilidad de sus vecinos y vecinas, lo que propicia, en algunos casos, su exclusión y marginalidad.
Al hilo, García Llorente ha informado de que su Grupo Parlamentario en el Congreso está preparando una proposición de ley de atención integral a barrios vulnerables por iniciativa de los diputados andaluces de Sumar, dado que 10 de los 15 barrios catalogados como vulnerables en España pertenecen a dicha comunidad autónoma (El barrio de El Varadero entre ellos, además de Huerta Carrasco-Esparraguera, Los Álamos-El cerrillo y San Antonio-Calle Ancha en Motril).
La iniciativa Por una Ley integral de barrios vulnerables pretenden que se incluyan medidas de educación, sanidad, rehabilitación de viviendas, garantía del suministro energético, infraestructura urbana, empleo, ayuda sociales y seguridad, para acometer la problemática de los barrios pobres como una “política de Estado” con la cooperación de varios ministerios, en lugar de abordar cada parcela sectorialmente y por separado.