Se da la circunstancia de que un quiosco de prensa o  una caseta de venta de churros de 2 metros cuadrados ubicados en la vía pública, está pagando una tasa de 581,8 euros anuales, mientras que un cajero del BBVA, o del Banco de Santander, o de cualquier otra entidad financiera no está pagando nada. Christian Linares, concejal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Motril, ha denunciado esta situación y ha reclamado a Flor Almón que corrija este despropósito.