En su propuesta, el Grupo de IU-Equo establece que los cajeros automáticos paguen una tasa por metro o fracción de ocupación de cualquier vía pública de 550 euros/mes muy por encima de los 154 euros que pagan actualmente. La formación de izquierdas propone que ese incremento sustancial de la recaudación se destine en su mayor parte a financiar actuaciones de carácter social, como podría ser el establecimiento de becas para ayudas al estudio a las familias motrileñas con menores recursos económicos.